Esta ejecución desencadenó condiciones bajo las cuales otros acuerdos de financiación y bonos por valor de 710 millones de dólares pueden ser inmediatamente pagaderos si los acreedores deciden ejecutarlos, dijo la compañía.
Sinic agregó que estaba en conversaciones con los prestamistas y otros interesados sobre los acuerdos de reembolso. El pago y el último pago de intereses de la primera tanda de bonos por valor de 250 millones de dólares vence el 18 de octubre.
El promotor, que tiene su sede en Shanghái, tiene un pasivo total de 1.010 millones de dólares en virtud de acuerdos de financiación en el extranjero.
Las acciones de Sinic están suspendidas de negociación desde el 20 de septiembre, tras desplomarse casi un 90% ese día.
Desconfianza
Los mercados de bonos chinos de alto rendimiento estaban sufriendo de nuevo, ya que el temor a un contagio de rápida propagación en un sector que
asciende a los 5 billones de dólares e impulsa una parte considerable de la economía china, seguía devastando la confianza.
Algunos tenedores de bonos en el extranjero de China Evergrande Group no habían recibido el pago de intereses antes de la fecha límite del lunes, hora de Asia, dijeron dos personas cercanas del asunto.
La firma, otrora el desarrollador inmobiliario más grande de China, tiene más de 300.000 millones de dólares en pasivos que ahora están en riesgo.
Otras señales de estrés incluían a un rival menor, Modern Land, que pidió a los inversores que retrasaran en tres meses un pago de bonos por 250 millones de dólares que vence el 25 de octubre, en parte “para evitar un potencial incumplimiento del pago”.
El bono de Modern Land para abril de 2023, con un cupón del 9,8%, se desplomó más del 25% en el día, a 32,25 centavos, según el proveedor de datos financieros Duration Finance, mientras que las acciones de la compañía cayeron más de un 2%.
Kaisa Group, que fue la pri-mera inmobiliaria china que cayó en ‘default’ en 2015, también vio cómo algunos de sus bonos declinaba a menos de la mitad de su valor nominal, mientras que los de R&F Properties y Greenland Holdings, que tienen proyectos prestigiosos en ciudades globales como Londres, también fueron ampliamente vendidos.
“Es un día desastroso”, dijo Clarence Tam, de Avenue Asset Management en Hong Kong, destacando cómo incluso algunas empresas supuestamente más seguras con “grado de inversión” habían visto borrarse ahora un 20% de sus bonos.
Precaución
Analistas de JPMorgan también destacaron cómo los inversores internacionales exigen ahora la prima más alta de la historia para comprar o mantener deuda china calificada como basura. “El riesgo de contagio de Evergrande se está extendiendo ahora a otros emisores y sectores”, dijeron.
Harbin, capital de la provincia nororiental de Heilongjiang, se ha convertido en una de las primeras ciudades chinas que anuncia medidas para apoyar a los promotores inmobiliarios y sus proyectos, que se han visto sacudidos por la crisis de Evergrande.
La atribulada firma y el temor a un contagio enviaron ondas de choque a los mercados globales y la empresa ya ha incumplido pagos de bonos en dólares por un valor combinado de 131 millones de dólares y vencieron los días 23 y 29 de septiembre.
Los asesores de los bonistas en el extranjero dijeron el viernes que aún no han tenido noticias de Evergrande y también están exigiendo más información sobre su plan para desinvertir en algunas empresas, preocupados por una posible venta forzosa que, en última instancia, les deje con menos. La cotización de las acciones de Evergrande, así como de su unidad Evergrande Property Services Group, está detenida desde el 4 de octubre, a la espera de un anuncio de un acuerdo importante.
Fuente: www.ambito.com