«Ni siquiera una pandemia gravísima como la que estamos viviendo autoriza la restricción de la libertad individual de cada ciudadano de Río, por el argumento de la posibilidad de transmisión acelerada de la enfermedad o incluso la falta de vacantes en hospitales», afirmó en su sentencia la jueza Regina Chuquer, de la VI Sala del Tribunal de Justicia de Río de Janeiro.
Para la jueza, los administradores públicos solo pueden exigir acciones o prohibir determinadas conductas si existe una ley que así lo determine, informó O Globo.
Entre las restricciones, ahora suspendidas, se encuentran la prohibición de circular por la vía pública de 23 a 5 de la mañana, tomar sol en las playas, bares y restaurantes abiertos hasta las 10 de la noche y discotecas y lugares de entretenimiento cerrados.
«El decreto del alcalde, Eduardo Paes, es inconstitucional, retira el derecho de ir y venir a las personas», dijo el diputado Anderson Moraes, vinculado al bolsonarismo de Río de Janeiro, que promovió la medida cautelar ante la Justicia.
Durante la mañana, la alcaldía no levantó sus restricciones argumentando que no había sido notificada. Una vez que eso ocurrió, anunció su intención de apelar la decisión judicial.
Río de Janeiro suma más de 22.000 muertos por coronavirus, que costó la vida de más de 378.000 personas en todo Brasil.
Entre los habitantes de la ciudad infectados se encuentra el alcalde Paes, que aún se está recuperando de coronavirus y está trabajando de forma remota desde su casa.
Fuente: www.ambito.com
