Además, la capitalización de mercado del ether es menos de la mitad de la del bitcoin pero sus volúmenes de negociación aumentaron hasta los 600.000 millones de dólares en mayo, un 60% más que los volúmenes del Bitcoin.
Un informe del banco Morgan Stanley enumeran una serie de factores que explicaría el por qué de esta dinámica y analiza la posibilidad de que haya un cambio en el trono de las criptomonedas.
La estratega de Morgan Stanley Sheena Shah y los analistas de renta variable James Faucette y Betsy Graseck, destacan que Ether «se considera más ‘verde’ que el Bitcoin». Esto se debe a su proceso de aprobación de transacciones que está cambiando hacía una prueba de participación en lugar de una prueba de trabajo.
Así, se eliminará la necesidad de grandes cantidades de cálculo y energía necesarias para validar las transacciones.
Hasta la fecha, los mineros de criptomonedas utilizan ordenadores especialmente diseñados para resolver complejas ecuaciones matemáticas que permiten la transacción de la criptomoneda. Pero esta nueva forma reduciría en un 99,9% el consumo.
Al mismo tiempo, Ether también tiene un nuevo «plan de suministro de dinero» que llegará en julio y que cambiará la forma de pagar a los encargados de minar esta criptodivisa, algo que hará que ésta sea más escasa.
«Se espera una actualización del protocolo (llamada EIP-1559) en la que las tasas que se pagan actualmente a los mineros (en ether) serán ‘quemadas’ en lugar de ser entregadas a los mineros», explican desde Morgan Stanley. Esto implica que el suministro será destruido, aumentando así su escasez.
Tampoco hay que olvidar que la gran mayoría de lo que se conoce como finanzas descentralizadas (DeFi, en inglés) todavía se ejecutan en la blockchain de ethereum.