Se trata del primer incremento que se registra en los surtidores desde el 1 de diciembre, y la medida venía siendo analizada en las últimas semanas por el Gobierno nacional junto a la petrolera.
La petrolera YPF aumentó sus combustibles desde la medianoche un 4,5 % promedio, pero con la implementación de un esquema de precios que recorte las brechas históricas entre la Capital Federal y el interior del país, informó la compañía.
Se trata del primer incremento que se registrará en los surtidores desde el 1 de diciembre, y la medida venía siendo analizada en las últimas semanas por el Gobierno nacional junto a la petrolera, en función de un retraso del precio en surtidores estimado entre el 10% y el 12%, según marca y producto.
La situación que atravesaba la petrolera de mayoría accionaria estatal también era compartida por el resto de las compañías privadas, por lo que se descarta que durante las próximas horas empresas como Shell, Axion y Puma darán a conocer sus incrementos en porcentajes similares.
Esta decisión de incrementar los precios de los combustibles «se da en pos de avanzar con los objetivos de producción de la compañía teniendo en consideración las particularidades del contexto macroeconómico del país», reseñó la empresa en una comunicación a la prensa.
La propuesta de YPF, explicaron, sostiene el descuento al personal de salud del 15%, «el cual es un colectivo muy sensible de unas 100.000 personas que se encuentran adheridas al programa de YPF«.
Las discusiones puertas adentro del Gobierno sobre las subas de combustibles se daban en el marco de una tensión entre la necesidad de una adecuación luego de un período de congelamiento y el posible impacto del alza de las naftas en la inflación general, teniendo en cuenta la repercusión sobre toda la cadena logística de productos. En las útlimas horas, justamente, el INDEC dio a conocer el alza en precios mayoristas de Julio, con una suba del 3,5%.
De hecho, según fuentes de las negociaciones, buena parte de las firmas del sector había sugerido que era conveniente un alza promedio del 10%.
La discusión se aceleró luego que YPF dio a conocer los resultados del segundo trimestre con una pérdida neta de $85.000 millones, en el marco de los efectos de la pandemia que llegaron a retraer la demanda hasta en un 90% respecto a las semanas previas al 19 de marzo.
Desde diciembre la industria mantuvo precios en surtidor congelados en pesos, situación que se disimuló desde marzo cuando el avance de la pandemia hizo derrumbar a niveles históricos el precio internacional del crudo, y en consecuencia restó presión al atraso de los combustibles.
Eso generó un «spread positivo» de los precios locales comparados con lo de paridad de importación, pero esa situación cambió con la recuperación parcial de los precios internacionales de crudo hasta alcanzar los actuales niveles en torno a los US$ 45 el barril de crudo tipo brent.