El proyecto para implementar la educación financiera en el proceso formativo de los estudiantes de Entre Ríos, abarcando los niveles primario, secundario y terciario, comenzó a debatirse en profundidad la semana pasada.
El contador Matías Méndez, de la Comisión de Asuntos Financieros del Consejo de Ciencias Económicas de Entre Ríos, dialogó con el programa El Séptimo Día, que se emite todos los domingos de 10 a 12 por Radio Plaza, sobre la urgencia de esta alfabetización, señalando que la falta de conocimiento financiero es un tema recurrente en la población.
Méndez explicó la necesidad de incorporar estos saberes desde temprana edad. «La finanza es transversal a todas las personas, independientemente de la actividad a la que nos dediquemos».
El profesional enfatizó que el foco de la educación debe estar en la formación de hábitos, más allá de los conocimientos técnicos. «Son los hábitos. Hacemos hincapié en lo simple, como el registro de los ingresos y los egresos, el hábito del ahorro y el hábito de conocer».
Además, el Consejo de Ciencias Económicas subraya la importancia de manejar más las habilidades blandas que lo estrictamente técnico y duro. Méndez destacó que la introducción de la educación financiera es crucial, ya que «reduce la pobreza».
Invertir desde los 13 años
La necesidad de esta educación se ha vuelto más acuciante debido a la digitalización del mercado, que facilita tanto las operaciones como las posibilidades de estafas. Méndez detalló cómo ha evolucionado la capacidad de los jóvenes para interactuar con las finanzas:
¿Desde qué edad pueden operar los chicos en las finanzas?
A partir de los 13 años, los chicos pueden abrir una caja de ahorro en un banco y tener una cuenta en una billetera virtual.
¿Pueden invertir?
Sí. También a partir de los 13 años, implementado desde el año pasado, pueden tener una cuenta comitente en un agente de bolsa para invertir en ciertos activos, como los fondos comunes de inversión.
¿Qué opina de esta temprana edad para operar?
Me parece buenísimo. A una temprana edad podemos entender que hay que armar un presupuesto, que tenemos ingresos, gastos, que tenemos que ir cuidando. Son hábitos que para mí son muy saludables.
Esta apertura temprana busca darles herramientas para el hábito del ahorro, algo que se había perdido en generaciones recientes.
Actualmente, no está establecido quién dictaría estos cursos en las escuelas. La implementación recaería en el Consejo General de Educación, tras la aprobación en la Cámara de Senadores. El Consejo Profesional de Ciencias Económicas se puso a disposición para brindar las herramientas necesarias y asegurar que la enseñanza sea dictada por «personas idóneas en el tema».
Respecto al creciente problema de las estafas virtuales y las promesas de riqueza rápida en internet, Méndez fue tajante: «Es un tema muy complejo. Para mí es conocimiento y estar atento. He visto hasta profesionales caer en este tipo de estafas, como en el caso Cositorto. Cuando la limosna es tan grande, hasta el santo desconfía».
Méndez instó a la población a conocer el mercado, ver los rendimientos y consultar antes de invertir.
Finalmente, el contador recordó que aunque el dinero se gana produciendo y trabajando, las finanzas están inmersas en ese proceso—desde cobrar a clientes hasta ahorrar para vacaciones o el cambio de vehículo— y no deben enfocarse solo en los mercados de capitales.
«Bajemos un eslabón y veamos que las finanzas es desde cuando cobramos nuestro sueldo y tenemos que decir cuánto ahorramos para las vacaciones, para la casa, o cómo manejamos nuestro presupuesto en el hogar».










