Gustavo Cusinato, presidente de la Mesa de Conducción del Congreso de la UCR y titular de la Unidad Ejecutora Provincial (UEP), opinó sobre la actualidad política, social y económica, y el «brutal ajuste» que se realizó el Gobierno Nacional. Enfatizó que la prioridad es resguardar fondos para servicios esenciales como salud, educación y seguridad, mientras se busca financiamiento internacional para proyectos de infraestructura viales.
Consultado por Debate Abierto sobre su nuevo rol en el radicalismo, ya que fue elegido presidente de la Mesa de Conducción del Congreso de la UCR, Cusinato expresó: «Es una tarea muy difícil por la dispersión que tiene el radicalismo» y añadió que aceptó el cargo porque todos los sectores del radicalismo, a pesar de su dispersión, lo convocaron o se sentían representados por él, a pesar de no pertenecer a su grupo político.
También precisó que su aceptación se basó en el reconocimiento de que garantizaría que la discusión en el Congreso fuera genuina y pretendiera resolver los problemas actuales del partido. También planteó como condición ampliar la mesa de siete a trece miembros, ya que el número original no era suficiente por la dispersión del partido.
Cusinato aclaró que el debate sobre la posibilidad de conformar frentes electorales no se dio en ese momento, pero que sí se abordaría a fines de este mes para definir la posición del Congreso sobre una posible ampliación.
También se refirió a la incertidumbre sobre la postura de La Libertad Avanza (LLA) respecto a una alianza y confirmó que, según la Carta Orgánica del partido, se han convocado elecciones internas para el 10 de agosto, y que las listas de candidatos a legisladores nacionales deberán formalizarse un mes antes.
Polarización
Cusinato opinó que, en el contexto político actual de polarización (kirchnerismo-anti-kirchnerismo), el radicalismo debería formar parte de un frente electoral más amplio, que le permita obtener representación legislativa nacional.
Afirmó que, aunque los candidatos elegidos en dicho frente irían al bloque radical en el Congreso para defender las posiciones del partido -como la educación, salud pública y los derechos de los trabajadores-, esto sería una medida pragmática y no una «traición» a la identidad radical.
Alianzas
El funcionario mencionó que la decisión de buscar alianzas también considera el riesgo para los intendentes radicales que podrían perder si compiten solos y destacó la importancia de la discusión interna para resolver los problemas del partido, lamentando la dispersión actual y la falta de diálogo.
Además afirmó que él mismo no es candidato a nada e incluso mencionó que, si el Congreso decidiera ir con una lista puramente radical, estaría dispuesto a renunciar a su función gubernamental e indicó que su objetivo es preservar la coalición con la que ganaron la provincia.
