Por Álvaro Gabás (*)
En el primer año gestión del gobernador Rogelio Frigerio, las políticas de Estado brillan por su ausencia. Me cuesta rescatar algún plan, meta, objetivo planteado por este gobierno. Sus aciertos tienen epicentro en acciones de índole político, pero muy lejos de las necesidades y demandas de esta sociedad. Es decir que, se olvidó de la calidad de vida de los entrerrianos. Si miramos el área de salud, educación, acción social u obra pública; el esfuerzo por recobrar algún precepto o materialidad es aún mayor. Con cierta petulancia e impericia han terminado un año administrativo, omitiendo gestión en su gobierno.
Rápidamente, se puede percibir, la indolencia del equipo de trabajo de Frigerio. Se caracterizan por ser foráneos a nuestra provincia, pero principalmente por la inexperiencia en la gestión pública. Los entrerrianos necesitamos de un estado presente como articulador del mercado, pero, sobre todo, como compensador ante las asimetrías de las mismas estructuras. Va de suyo, que la obra pública, no solo es un motor de desarrollo económico por el círculo virtuoso que despliega sus fuerzas centrífugas, sino también, por que mejora enormemente el bienestar de cada pueblo, de cada ciudad de nuestra provincia. Necesitamos un estado presente, donde la Educación sea el bastión de un progreso sostenido que estriba en una movilidad social ascendente. Necesitamos de la Salud y Acción Social como columnas de soporte para mitigar cualquier falencia, dolencia y carencias que la comunidad acarrea en esta crisis socio-económica.
El gobernador Frigerio, se ha olvidado de estos pilares sociales que son indispensables para nuestra calidad de vida. No existen programas estatales provinciales que prevean alguna solución de fondo, es decir, estructural ante las dificultades que atravesamos a diario. Las respuestas del gobierno, siempre han sido coyunturales, superficiales y sin la sapiensa que requieren. Se han aprovechado de aspecto políticos – populares, para sobrellevar las insuficiencias propias.
Frigerio y su gobierno, termina un año con mucha capacidad de comunicación y de sostenimiento del poder político, pero a la vez, con un gran déficit de conocimiento de las necesidades entrerrianas.
(*) Contador – Magíster, exsecretario de Producción. Referente del Centro de Estudio de Desarrollo Macroeconómico (CEDMA).
