Paralelamente, el 53% de la deuda adjudicada correspondió a cuatro instrumentos a tasa fija. Dentro de este segmento se destacó la demanda por la Letra a Descuento (Ledes) con vencimiento en febrero del año próximo, a una tasa de casi 41%.
El 37% correspondió a tres títulos indexados a la inflación (CER), entre los cuales resaltó la colocación de una Lecer con fecha límite en octubre del año que viene y un rendimiento real pactado del 1,26%.
Por último, el 10% restante de la licitación estuvo vinculado a un bono ajustable a la tasa Badlar (+5,25% de rendimiento), con plazo a febrero de 2023.
Con lo que consiguió en esta jornada, más los $105.000 millones de financiamiento neto que había obtenido en las licitaciones previas, al Tesoro le sobre resto para afrontar los $292.377 millones que vencen entre el 31 de diciembre y el 3 de enero.
A partir de estos números, en diciembre Economía muestra un endeudamiento neto de $147.074 millones, el segundo monto más elevado del año detrás de junio. Asimismo, en el acumulado de 2021 la cifra asciende a $731.405 millones, lo que implica una tasa de refinanciamiento del 121% en comparación con los vencimientos que había en el período, y equivale a cerca del 1,6% del PBI.
Cabe recordar que la meta del Gobierno era financiarse vía mercado por $900.000 millones, algo que finalmente no pudo lograr debido fundamentalmente a algunas licitaciones magras en el comienzo del segundo semestre. Para el año que viene el oficialismo estima conseguir deuda en moneda local por el 2% del producto.
La primera licitación de 2022 tendrá lugar el próximo miércoles 12 de enero, tal y como fue informado previamente en el cronograma preliminar de licitaciones del primer semestre.