El Gobierno espera que el país vecino agilice la importación mediante la eliminación de normas técnicas o barreras sanitarias, que hoy demoran las ventas empresariales. Ya existe una aceptación de la administración brasileña para liberar exportaciones
Luego de arduas negociaciones, el Gobierno obtuvo el compromiso de Brasil de que en las próximas semanas se aprobarán o agilizarán exportaciones por al menos 1.000 millones de dólares hasta fin de año, de acuerdo con información a la que accedió BAE Negocios.
Fuentes de la Embajada argentina en Brasil confirmaron a este medio que en el corto plazo la uva a granel vuelve a ser exportada a ese mercado, lo que representará un ingreso de al menos 20 millones de dólares anuales para el comercio local. Esta novedad continuará con el desembarco más rápido de otros bienes que hoy sufren las llamadas medidas paraarancelarias, y que las autoridades brasileñas ordenaron «correr del camino», ya que la Argentina hará lo propio con productos brasileños.
Este es el listado de los productos nacionales que ya tuvieron la respuesta positiva del Planalto en el sentido de que se eliminarán las barreras técnicas, y tanto sanitarias como fitosanitarias:
Asimismo, existen conversaciones para la ampliación de exportaciones de autopartes o maquinaria industrial, dado que el interés del Gobierno en subir el valor agregado en las ventas externas. «Estamos próximos a recuperar el mercado de uva fresca a Brasil. Tiene un potencial de 20 millones de dólares anuales», señalaron ayer cerca de Scioli. «Fruto del trabajo en conjunto con el Ministerio de Agricultura, esta nueva apertura se suma a los 150 millones de dólares que tiene el mercado de langostinos, después de ocho años de bloqueo judicial», amplió Scioli, dando cuenta de otra primicia de este medio.
Plan plurianual
Más allá de estas reaperturas, Cancillería y la Embajada en Brasil trabajan sobre el programa de exportaciones «2020-2022», para lo cual Scioli se reunió con sus diez cónsules y les pidió buscar todos los mercados potenciales para cualquier sector de la economía.
Aunque con el condicionamiento de la pandemia, se avanzará en misiones y encuentros virtuales en todos los estados de Brasil, con preeminencia en zonas no tradicionales para la Argentina. Por otro lado, Scioli está negociando en forma permanente la habilitación de 60 «puertos secos» para el desembarco de productos nacionales, junto a una rebaja en los costos logísticos en dichas áreas.
Uno de los objetivos centrales es elevar la competitividad de las empresas locales y recuperar mercados en Brasil, perdidos durante la gestión anterior. El embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, celebró recientemente que «ya no hay más trabas» comerciales con Brasil para exportarle productos de las economías regionales argentinas y señaló que se ha empezado a corregir un «problema estructural» que le ha dado al país un déficit comercial de USD52.000 millones en los últimos quince años en la balanza con el gigante sudamericano.
«Ya no hay más trabas en el agro para exportar productos de nuestras economías regionales a Brasil», celebró el embajador. Estas próximas conquistas en varios productos se suman a los primeros embarques de langostinos, que ya están camino a Brasil, y que partieron del puerto de Mar del Plata.
Uno de los directivos de la Confederación General de la Industria (CGI), Augusto Santucho, expresó en relación con los avances respecto de Brasil que «celebramos la gestión del Gobierno porque en momentos tremendos de pandemia, donde las economías se cierran, se muestra un gran nivel de compromiso con la industria nacional».
Santucho, que mantiene vínculos comerciales con Brasil, destacó que «somos economías complementarias, siempre lo fuimos. Si Brasil crece, la Argentina crece, nos tracciona. Estas acciones generan claras posibilidades de negocios mientras observamos caídas de PBI en varios países del mundo».
Fuente (Bae negocios)