Ambas criptomonedas, las de mayor volumen de mercado, tuvieron sus picos este año y luego sufrieron la debacle que conmovió a los inversores. Pero ahora parece envalentonadas. Incluso, los alcistas de Bitcoin pronostican que antes de fin de año el valor llegará a cerca de u$s100.000.
En cambio, para algunos analistas, el precio de Bitcoin podría seguir enfrentándose a una presión a la baja durante agosto. El repunte del 42% de finales de julio inspiró efectivamente algunas apuestas optimistas en las opciones a corto plazo, pero los datos iniciales favorecen en gran medida a las opciones de compra de neutrales a alcistas, y el hecho de no mantener el nivel de los u$s40.000 ha reducido significativamente dicha ventaja.
Una buena parte de la presión proviene probablemente de la propuesta de infraestructura en el Senado de los Estados Unidos. El proyecto de ley HR 3684 endurece las normas sobre las empresas que manejan criptomonedas y amplía los requisitos de declaración para los brokers, lo que ha pesado en el impulso alcista del mercado.
Además de endurecer la normativa sobre las empresas enfocadas en las criptomonedas, los promotores del proyecto de ley creen que pueden conseguir u$s28 mil millones de financiación adicional ampliando las responsabilidades fiscales que aplican sobre las transacciones de activos digitales.
Para algunos analistas los compradores se replegaron al conocer la noticia de que Estados Unidos pretende recaudar 30.000 millones de dólares en base a impuestos a las criptodivisas para financiar parte del plan de infraestructura que planea Joe Biden.
Dentro de las principales criptomonedas, las que más subían por estas horas, además de Bitcoin y Ether, son Cardano, Dogecoin, Polkadot, Uniswap, y Binance Coin.