La Cámara Electoral puso fecha límite para convocar a las primarias y en el gobierno sintieron la presión de decidir sobre el tema.
La acordada de la Cámara Nacional Electoral en la que se detalla el cronograma electoral y se fija la fecha límite para efectuar la convocatoria a las primarias reactivó en el gobierno la necesidad de avanzar en algunas definiciones.
Si bien la hoja de ruta de la Justicia quedará sujeta a las fechas que determine el gobierno y que deberán pasar por el Congreso, ese trazado expuso dos corrientes claras dentro del gobierno respecto de si llevar adelante o no el sistema de elección implementado por primera vez en 2011.
Un sector del Frente de Todos afirma que las Paso son un error y que hay que aprovechar esta situación de pandemia para evitarlas sin mostrar debilidad política. Esa corriente argumenta que las elecciones primarias son funcionales a la oposición porque fortalecen el voto útil.
Si un candidato fuerte se impone en la primaria, en la elección general los votantes del candidato derrotado trasladan sus votos al triunfador. Eso fortalece en esta elección legislativa a la oposición, toda vez que el oficialismo será más reticente a tener internas.
Pero otro sector del gobierno piensa todo lo contrario y ven a las primarias como una salida a las tensiones internas que afloran en el Frente de Todos. En ese contexto, entrar en modo electoral sería una salida rápida para encolumnar a todo el peronismo detrás un objetivo común: derrotar a Cambiemos.
La definición de la Cámara Electoral no significa que el cronograma electoral sea inamovible. La acordada de la Justicia tiene un fin organizativo y protocolar con fines de organizar el calendario electoral independientemente de lo que después termine definiendo la política.
Sin embargo, en el gobierno confían que el cronograma los apura a una definición que preferían seguir pateando hacia adelante.
El lunes, Alberto Fernández volvió a manifestarse en contra de la realización de las internas obligatorias en virtud de la situación sanitaria por el coronavirus y del costo que implican las elecciones, recursos que, según el Presidente, podrían utilizarse por ejemplo para pagar dosis de vacunas.
Según la acordada, el 10 de mayo (es decir, dentro de 55 días) vence el plazo para la convocatoria a las elecciones primarias. En tanto, el 9 de junio, 60 días antes de la primera jornada electoral, se pondrá fin al plazo para solicitar el reconocimiento de alianzas transitorias y confederaciones para participar en los comicios.
Según el calendario, el domingo 8 de agosto serán las primarias, mientras que el 24 de octubre serán las generales. En los hechos, todo el cronograma electoral e extenderá desde el 27 de abril hasta el 1° de diciembre.
Además, se definió que el lunes 19 de junio comenzará la campaña electoral para las Paso. Es el mismo día en el que finaliza el plazo para la presentación de listas de precandidatos ante las juntas electorales partidarias.